¿Quiénes son? Nacieron antes de 1955
- Son hijos de la post-guerra. Nacen en años duros, conocen un régimen autoritario y de alguna manera son los artífices de la transición española
- Se suele señalar la visita de Eisenhower a España y la entrada en la ONU en 1955 como el final de la época de autarquía y aislamiento en España y por tanto el fin de esa postguerra del hambre y la pobreza
- Crecieron en una sociedad de escasez y austeridad y fueron educados en una cultura de esfuerzo y dedicación
- Tuvieron pocas oportunidades educativas y menos posibilidades de acceder a la Universidad, y se incorporaron muy jóvenes al mercado laboral
- Su ventana al mundo fue la radio y la prensa escrita
- Muestran gran respeto por la jerarquía y la autoridad. Su carrera profesional se desarrolla prácticamente en una sola empresa, a la que son fieles y donde quieren jubilarse, es decir, sus planes son de permanencia a largo plazo
- Valoran el sacrificio y la cantidad de esfuerzo más que el esfuerzo de calidad
- Buscan relaciones duraderas basadas en la confianza y valoran la experiencia de los demás
- Están jubilados o próximos al retiro
¿Cuáles son sus retos?
Tránsito profesional hacia la jubilación
En los últimos años de carrera profesional, muchos veteranos y empresas estarían dispuestas a diseñar una transición laboral más adaptada a las necesidades de ambas partes. Se trata de flexibilizar nuevos modelos de trabajo en tiempo y forma, que armonicen más favorablemente la aportación de valor al trabajo de los veteranos y se compatibilice con su momento vital.
En este sentido la legislación debe dar un impulso a estas nuevas formas de trabajo para que no penalice ni a las empresas ni a la cotización de las pensiones de este colectivo.
Potenciar una jubilación activa y saludable
Favorecer el envejecimiento activo, saludable y sostenible en la etapa de la jubilación empieza a ser una prioridad de todos. Es importante anticipar y prevenir los retos del envejecimiento durante este nuevo periodo y prever la importancia del cuidado de su salud física, cognitiva, psicológica y social.
Después de la jubilación no tiene por qué venir la inactividad, sino todo lo contrario, es el momento de realizar aquellas actividades que mejor nos hacen sentir y que nos generen mayor satisfacción. El tener proyectos vitales y profesionales es el mejor de los aliados para mantener una buena salud y bienestar.
Salud física: A lo largo de esta fase surgen cambios físicos y la prevención de la enfermedad es fundamental. Tenemos que ser proactivos y conocer estas enfermedades potenciales y saber cómo prevenirlas y actuar.
Salud cognitiva: Debemos conocer la importancia de proteger el cerebro y de prevenir su deterioro cognitivo, aprender a cuidar el cerebro y potenciar su reserva cognitiva.
Salud psicológica: La gran temida jubilación. La nueva generación de jubilados se siente en plena posesión de sus facultades y tienen la necesidad de ser considerados como personas útiles a la sociedad, enfrentándose al sentimiento de frustración y desvalorización que provoca el momento de la jubilación. En esta nueva etapa es muy importante darles herramientas para vencer las creencias negativas de la frustración y ayudarles a generar una visión más realista y motivadora de su nueva vida.
Salud social: La conexión social con las personas nos aporta grandes dosis de felicidad, sin las cuales nuestro envejecimiento sería más acelerado. Tenemos que generar alternativas para evitar la soledad, el aislamiento o la marginación.
Salud financiera: Los recursos económicos se recortan drásticamente en la jubilación y es el momento de gestionar una nueva economía que nos haga sostenibles en el tiempo.