El Comité de expertos en salud y bienestar intergeneracional analiza a la Generación Z

El Observatorio Generación & Talento ha vuelto a convocar a su Comité de expertos en salud y bienestar intergeneracional para analizar en esta ocasión la salud laboral de la Generación Z.

Estas sesiones de trabajo forman parte del estudio que el Observatorio GT está desarrollando sobre la salud y el bienestar de cada una de las cinco generaciones en el ámbito laboral, junto a la Universidad Europea como socio académico, y Criteria y Geseme colaborando como partners técnicos en los foros de trabajo.

Este estudio reflejará la auto percepción que tienen cada una de las generaciones sobre su salud y bienestar;  su demanda de programas para potenciar su salud, y el gap que hay entre lo que piden y lo que reciben. El análisis diagnosticará también la diferencia que hay entre la salud percibida y la ideal, e identificará programas que promueven y facilitan la salud y el bienestar generacional global.

El Comité de expertos

Este comité de expertos del Observatorio Generación & Talento está formado por profesionales de; Quirón Salud,  Universidad Europea, FREMAP, Instituto de Salud Carlos III, Universidad Pontificia Comillas, ICAI – ICADE, Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST), DKV Salud, Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid, AESPLA, APA, y líderes de opinión; Belén Marrón, miembro del Consejo Asesor del Ministerio de Sanidad y Javier Dols, médico en la Comunidad de Madrid, autor de «Tu mejor medicina eres tú», además del propio Observatorio Generación & Talento.

¿Cómo percibe su salud la Generación Z?

La percepción global de la Generación Z sobre su salud es buena, aunque con matices; gozan de buena salud física, por su momento vital y porque están muy concienciados con los hábitos saludables, tanto en alimentación como en la práctica de deporte.

Entienden su salud como un global, con las tres vertientes: física, social y emocional. Su salud psico-social ya no es tan buena. En cierta medida por la ansiedad que les provoca su precariedad laboral -ven que su dilatada formación no les garantiza el empleo- , y la incertidumbre del entorno desfavorable que les rodea. A partir de cierta edad, expresan una sensación de desplazamiento de su puesto de trabajo. La permanente exposición a las nuevas tecnologías también afecta a sus niveles de estrés. La salud social la manejan a través de familia y amigos.

El Comité de expertos también reflexionó sobre los programas que las empresas deberían poner en marchar para mejorar y promocionar la salud de esta generación, como por ejemplo, programas de habilidades para hacer frente a las enfermedades crónicas, o la implementación de culturas que permitan a los empleados afrontar un envejecimiento en una salud óptima sabiendo que no van a tener una salud ideal.

 

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